sábado, 4 de enero de 2014

2.- Tres Cantos - Manzanares

2.- TRES CANTOS - MANZANARES
 
 
Preparados para la etapa
Crónica de la jornada:
Después de haber repuesto fuerzas
nos dirigimos a por nuestra segunda
etapa, que nos llevará hasta Manza-
nares El Real. Nada más salir del
hostal nos encontramos con las calles
vacías de Tres cantos, es domingo y el
Sol aun no calienta, así que estarán
todos durmiendo. A mi lo que me ape-
tece es darme unas carreritas.
En seguida salimos de la ciudad y aparece campo. El primer tramo por el que vamos tiene subidas y bajas y no está
en muy buen estado, por eso ¡me encanta!. De vez en cuando oigo disparos y me asusto un poco, hay cazadores en lo alto de algunas lomas. También nos encontramos con ciclistas pero lo que más mola es un riachuelo que tenemos que cruzar once veces.
Mientras caminábamos nos encontramos con un rebaño de ovejas. A mi me apetecía jugar con ellas, así que me acerqué y las di unos ladridos, de repente todas se juntaron y se venían detrás mía. Mi amo me dijo que me acababa de convertir en un perro pastor. Tardaron un buen rato en dejar de seguirnos.
Árbol solitario
Poco a poco el camino se fue haciendo más amplio y claro y en ligero ascenso. A un lado del camino teníamos pequeñas lomas muy bonitas y en una había un árbol muy solitario, era muy chulo.
Andando seguíamos y yo veía charcos, pero resulta que se habían congelado y podía pisar sobre ellos hasta que de repente uno se rompió y me moje las patas, ¡qué fresca estaba el agua!.
Cuando nos quisimos dar cuenta ya habíamos llegado a Colmenar Viejo, único pueblo que hay en nuestra etapa de hoy, así que aprovechamos para hacer una paradita y reponer algo de fuerzas. A la salida de este pueblo nos encontramos con una pared pintada muy bonita, era nuestro camino de Santiago.
Bonito graffitti
Una paradita
 Al salir de Colmenar estuve jugando con más perritos. Poco a poco el camino se fue llenando de piedras y haciendo más estrecho y cuesta arriba. Hacía calor y con todo el esfuerzo que íbamos haciendo nos tuvimos que parar en una sombra.
Al ver tanta piedra me alegré porque a mi gusta saltar de una a otra. Tanta piedra era señal de que nos estábamos acercando a La Pedriza.
Hoy todo el camino está muy bien señalizado. Hasta nos hemos encontrado mojones que pone la distancia que queda hasta Santiago de Compostela.
Santiago aun está lejos
A veces hay fincas y hay perros muy grandes y que ladran mucho. En una finca estaba la puerta abierta y todos salieron corriendo a saludarme. Yo si ladran mucho o saltan por la valla me cago de miedo.
Qué embalse más grande
Tras cruzar por debajo de una carretera las piedras nos abandonan temporalmente y el camino se vuelve más abierto y cada vez con más árboles. De pronto y al coronar una subidita nos sorprende el pueblo de Manzanares acompañado por el embalse al que da nombre.
En seguida cruzamos el embalse y al adentrarnos en sus calles nos encontramos con un chico montando en bici con un remolque con mucho equipaje y su perro corriendo atado al manillar. ¡Eso también lo hacemos nosotros!. Una pena que no pudimos hablar con él.
Ya en las calles de Manzanares buscamos nuestro alojamiento para hoy. Fue en una casa rural que se llama El mirador de la Maliciosa. Aunque es domingo y supuestamente está cerrada el otro día hablamos con el dueño y nos dejaba una habitación para dormir y luego un buen desayuno. Al ser una casa rural a mi me encanta. estamos a los pies de La Pedriza, se escucha el rio Manzanares y desde la habitación tengo salida a una terraza. Al ser tan chulo es un poco caro, pero el hombre se tiró el rollo y nos hizo un buen descuento por ser peregrinos.


Datos de la etapa:

Distancia: 28,5 kms.     Tiempo: 5:58     Vel. media: 5 km/h
Alt. máx.: 1.008 m.     Alt. mín.: 633 m.     Desnivel: 633 m.




Mapa

 
Perfil





 





No hay comentarios:

Publicar un comentario